20 cosas que debes de hacer este curso en Málaga
Hola, cada curso nuevo viene lleno de nuevos retos y nuevas aventuras, para este año os proponemos 20 cosas que tienes que hacer a lo largo de este curso en si estudias en Málaga
Visitar la famosa Manquita (catedral)
A la catedral de Málaga se le conoce como la Manquita porque nunca llegaron a acabar las construcciones de la segunda torre y, por tanto, se quedó de forma inconclusa. Su levantamiento comenzó en el año 1525 y no terminó hasta el 1782, más de dos siglos después. Este largo proceso hizo que sus originales trazados góticos evolucionaran hacia un estilo renacentista. Visitar la Manquita es imprescindible en un viaje a Málaga.
Pasear por calle Larios
La calle Larios equivale a la Gran Vía madrileña. Es el punto neurálgico de la ciudad, donde los malagueños quedan a menudo para reunirse. Al ser una calle peatonal, podrá pasear tranquilamente por ella y entrar en algunas de sus tiendas y comercios. Si lo suyo no son las compras, en sus calles adyacentes hay numerosos bares donde ir de tapas.
Comer espetos en un chiringuito
La Costa del Sol es conocida por sus chiringuitos donde uno puede tomar los mejores platos de pescaíto frito como los boquerones, así como otras delicias como las coquinas, los calamaritos o los chipirones. Sin embargo, una experiencia religiosa de un viaje por la provincia es probar sus espetos de sardinas, el plato estrella de Málaga. Estas son cocinadas con una técnica muy peculiar, atravesadas por el lomo con una caña y después asadas a la leña sobre la arena. Van acompañadas simplemente con un poco de limón y sal.
Descubrir el glamour de Puerto Banús
Marbella es uno de los lugares más exclusivos de España. Por ello, otro de planes que hay que hacer en Málaga es acudir a esta ciudad costera y pasear por su famoso Puerto Banús donde la opulencia alcanza cotas difíciles de superar. Aquí se concentran las marcas más lujosas del mundo, y en cada esquina se encontrará coches de alta gama y yates que le dejarán con la boca abierta.
Realizar el Caminito del Rey
Uno de los planes para hacer en Málaga imprescindibles es realizar el Caminito del Rey. Se trata de una de las rutas de senderismo más emocionantes de la provincia. El recorrido transcurre por las paredes verticales del desfiladero de los Gaitanes, más conocido como “El Chorro”, a más de 100 metros de altura y por donde pasa el río Guadalhorce. En total son 7,7 km, de los cuales 4,8 son de accesos y 2,9 de pasarelas. No es recomendable si padece vértigo.
Visitar la Alcazaba
La Alcazaba es probablemente el monumento más emblemático de Málaga, junto con su catedral. Tendrá que ascender a este palacio fortaleza del siglo XI para poder admirar las mejores vistas de la capital boquerona y de paso, conocer la arquitectura nazarí. Además, a sus pies se encuentran el Teatro Romano y el Palacio de la Aduana, por lo que es el lugar ideal desde el que reconocer la mezcla de culturas de esta ciudad.
Vivir la Semana Santa como un malagueño
Vivir la Semana Santa de Málaga implica un paso obligatorio por las calles del centro abarrotadas de gente, tomarse una cañita mientras se escucha de fondo el redoble de los tambores y oler el intenso aroma del incienso. De hecho, hay que asomarse a cualquiera de sus procesiones para notar el sentimiento de solemnidad que desprenden los malagueños al portar los tronos sobre sus hombros mientras avanzan al ritmo de las marchas.
Visitar el Museo Pompidou
Málaga está repleta de museos de arte y este es uno de los más destacados de todos ellos. Fue inaugurado en 2015 como una sede del gran Centro Pompidou de París. Si le gusta el arte contemporáneo, disfrutará con las abstracciones de Kandinsky y el suprematismo de Kazimir Malévich, pasando por pinturas de otros artistas tan importantes como Pablo Picasso o Marc Chagall. Asimismo, el museo cuenta con exposiciones temporales de gran interés.
Probar el plato de los montes
Objetivo Málaga
Además de los clásicos espetos y el pescaíto frito, en Málaga es famoso el plato de los montes. Una comida suculenta, pero igualmente sabrosa que contiene lomo, chorizo, patatas fritas, huevo y pimientos asados, aunque esta receta puede variar ligeramente. Lo sirven en muchos lugares de la provincia, pero sobre todo en los Montes de Málaga. Así que es una opción muy merecida tras una caminata por estas montañas. No se quedará con hambre.
Realizar una ruta por el Torcal de Antequera
El Torcal de Antequera es uno de los lugares más misteriosos y singulares de Málaga. Se trata de un paraje natural donde las rocas calizas han desarrollados formas únicas y caprichosas por un proceso de modelado kárstico, ya que este lugar se encontraba sumergido hace 200 millones de años por el mar de Tetis. Ha sido declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO por su enorme valor geológico. Aquí podrá realizar alguna de sus rutas circulares, de 1,5 y 3 kilómetros. El paisaje no le decepcionará.
Visitar el pueblo de Ronda
Otra de las cosas que no puede perderse en un viaje por la provincia es visitar Ronda, ciudad romántica de leyendas de bandoleros y cuna del mundo del toreo. Aquí tendrá que cruzar su Puente Nuevo, una impresionante obra de ingeniería del siglo XVIII a más de 100 metros de altura y encajada sobre la garganta del río Guadalevín, así como asomarse a su mirador del balcón del Tajo para apreciar las vistas de la serranía de Ronda. Otros planes muy recomendables son degustar su cocina y visitar su plaza de toros donde se celebran sus famosas corridas goyescas.
Vivir la feria de Málaga
Además de la célebre Feria de Abril de Sevilla, Málaga posee su propia feria que no se queda atrás en cuanto a diversión y arte. Cada año a mediados de agosto el centro de la ciudad se adorna con farolillos y guirnaldas, y las calles se llenan de gente que disfruta de la música y la bebida más famosa de estas fechas: el vino blanco Cartojal. Verá conciertos, verdiales y mucho flamenco.
Tomar el sol en las playas de Málaga
Si por algo es conocida Málaga es sin duda por ser la Costa del Sol, un destino con buen clima durante todo el año. Si viene a esta provincia, tendrá que dedicar al menos un día para bañarse en su mar y tomar el sol en playas como la de la Malagueta, Playamar, el Bil-Bil, Puerto Banús o Pedregalejo. Aunque las más espectaculares son las de Cabopino, de arena dorada, la de Calahonda, de aguas cristalinas y la de Maro, en medio de un área natural y el lugar perfecto para practicar snorkel.
Pasear por Muelle Uno
Otra de las cosas que hacer en Málaga es sin duda pasear por el Muelle Uno y su Palmeral de las Sorpresas. El paseo transcurre junto al pequeño, pero coqueto puerto de la ciudad y cerca del llamativo cubo de colores del Centro Pompidou. Es un lugar perfecto para tomar una bebida en un ambiente animado y con bonitas vistas de la ciudad y del mar.
Visitar el Cementerio Inglés
Una de las curiosidades que alberga Málaga es su Cementerio Inglés, el camposanto protestante más antiguo de España, creado en 1829 por la insistencia de un cónsul británico. Robert Boyd fue el primero en ser enterrado aquí, después de ser fusilado por su participación en el pronunciamiento encabezado por el general Torrijos. En este lugar descansan también importantes personalidades como el poeta Jorge Guillén, el escritor Gerald Brenan o la economista Marjorie Grice-Hutchinson.
Probar el vino dulce de Málaga en El Pimpi
Página oficial de Andalucía
El Pimpi es un lugar de culto para los malagueños. Pocos sitios resumen tan bien la esencia del sur de España: desde su decoración centenaria típicamente andaluza, pasando por sus avispados camareros, hasta su ambiente tan alegre. Un plan imprescindible es acudir a este bar bodega, situado frente a la Alcazaba y el Teatro Romano, y probar el vino dulce malagueño que se obtiene principalmente de las variedades de uva blanca pedro ximénez y moscatel. Es tanta su fama que por aquí han pasado todo tipo de celebridades, que reconocerá en las fotos que cuelgan de sus paredes y hablan de su historia.
Perderse por el casco antiguo de Marbella
Todo el mundo conoce el lado más glamuroso de Marbella, pero muchos obvian su barrio tradicional. Antes de convertirse en la ciudad del lujo que es hoy, Marbella era una localidad que vivía del mar y la agricultura, y en su casco antiguo aún se respira el ambiente pesquero y las influencias árabes. Merece la pena perderse por sus calles estrechas, sentarse en una terraza de su plaza de los Naranjos o su plaza de la Victoria, así como visitar su capilla de San Juan de Dios.
Probar los diferentes cafés de Málaga
Que el sur de España tiene su propio argot no es ninguna novedad y sobre todo en Málaga los vocablos castizos abundan mucho. Si es la primera vez que pisa la provincia, probablemente muchas palabras le sonarán a chino, especialmente las del mundo del café. Sombra, nube, mitad, semilargo… todos estos son nombres de tipos de cafés que deberá aprender para pedir uno.
Descender a las Cuevas de Nerja
Las Cuevas de Nerja fueron descubiertas en 1959 por un grupo de nerjeños que buscaban murciélagos, sin ser conscientes de la envergadura del lugar. Una excursión muy interesante es descender al interior de estas cuevas y descubrir sus estalagmitas, gours y otro tipo de espeleotemas. Además, aquí se encuentra la estalactita más grande y larga del planeta, que alcanza una altura de 33 metros y se haya en la Sala del Cataclismo, llamada así por su aspecto anárquico.
Probar los helados de Casa Mira
En un lugar como Málaga, donde las temperaturas son suaves todo el año y el calor aprieta en verano, siempre apetece algo refrescante. En plena calle Larios se encuentra la heladería Casa Mira que vende los helados más famosos de la ciudad. Se trata de un negocio centenario abierto desde el año 1890 y por el que han pasado cuatro generaciones de una misma familia procedente de Jijona.