Universitarios llenan las bibliotecas de la UMA en el primer día de apertura
Antes de las nueve de la mañana ya había un buen grupo de jóvenes a las puertas de la Biblioteca General de la UMA, en el campus de Teatinos. No ha habido ‘lunes de resaca’ terminada la feria, y el primer día de apertura tras el cierre por las vacaciones de verano (del 1 al 20 de este mes) se saldó con una elevada ocupación, sobre todo en la Biblioteca General, prácticamente llena ya al mediodía. Las otras dos bibliotecas con horario especial de apertura, la de las escuelas de Telecomunicación e Informática, y la de Económicas (en ambos casos, de 9 de la mañana a 3 de la madrugada), registraron una ocupación media por la mañana, pero ya casi al completo por la tarda. En total, la UMA ha puesto a disposición de sus estudiantes y del público en general 1.362 puestos de estudio: 562 en la General, 460 en la de Teleco e Informática y otros 340 en Económicas, en el campus de El Ejido.
La General y la de Teleco e Informática, en Teatinos, y la de Económicas, en El Ejido, abren para ayudar en la preparación de los exámenes de septiembre
En la Biblioteca General (que hasta el 31 de agosto abrirá de 9 de la mañana a 7 de la mañana del día siguiente) aún se podían ver ayer operarios trabajando en la sustitución de las instalaciones de climatización, una obra que ha costado a la UMA 312.000 euros. Cuando abrió a las nueve de la mañana, ya había un buen número de jóvenes esperando a las puertas. Y llegan con sus desayunos, agua e incluso fiambreras con el almuerzo, que pueden calentar en una sala especialmente preparada. Hasta el día de ayer, en que abrieron estas tres bibliotecas de la UMA, Pablo Rodríguez y Cristian Armenteros han ido a estudiar a la municipal de Las Chapas, la única abierta en agosto. El primero estudia Historia del Arte, y se ha dejado alguna asignatura para septiembre «para preparármela más a fondo». Cristian terminó Derecho y prepara oposiciones a inspector de Policía. Sonia Medina (cinco suspensos) estudia primero de Relaciones Laborales y Lucía Carrasco (un suspenso) segundo de INEF en Granada. Prefieren acudir a la biblioteca de la UMA «porque te organizas mejor, te obliga a levantarte y en casa siempre hay algo que te entretiene». Kevin Muñoz, mallorquín, confía en aprobar el 1 de septiembre Centrales Solares, la que le queda para terminar Ingeniería de la Energía.
Opositores
También las bibliotecas son lugar de encuentro de opositores. Es el caso de María Jesús Ramírez y de Anasol Muñoz, la primera diplomada en Relaciones Laborales y la segunda licenciada en Biología. «Contando los días para que abriera», confesaban a las puertas de la General, durante un receso. En la de Informática y Teleco, Carlos Melguizo, granadino, prepara los exámenes para el MIR. Supone que serán en enero, pero hasta tanto «no queda otra que estudiar», aunque sea un lunes después de feria.